Vuelvo a las andadas, que ya tocaba.  No hay excusas que valgan, en realidad estos meses han sido una suerte de «procastrinamiento», que dirían los microsiervos.

Retomo con un tema que llevo años rondando, y como en casi todos (los que me rondan) no he hecho nada. Bueno, sí.  Hablo y hablo, comento en pasillos y café, cotilleo en Internet, pero…nada demasiado propositivo, al menos por ahora.  Se trata de los sitemas de gestión de información y su relación con evaluación.

Mucho que cortar en este tema.  Por puro sentido común convendrán conmigo que son cuestiones altamente correlacionadas en cualquier institución.  Sin embargo, todavía me está costando encontrar ejemplos válidos de uso de los ERP (comerciales, a medida, propietario, código abierto…) en evaluación, más allá de la dimensión/función evaluativa del control de recursos.  Obvio que para eso son la panacea. Pero cuando queremos dar el salto a Resultados (en lenguaje «Modelos lógicos» o Teoría de Programa»), ¿qué hacemos? En algunos casos, malabarismos para relacionar datos de «proceso» (proceso de gestión, claro, no procesos socales) con «resultados» (variables dependientes, señales de calidad/progreso). Pero poco más.

Siento no dar mucho vínculo en este post. Dejo la respuesta a un tema similar que he dado en el foro SolucionesONG, en el que de tanto en tanto también escribo. Espero comentarios/críticas, pero sobre todo propuestas concretas, ejemplos y casos (de éxito, a ser posible). En esta época con el knowledge management tan de moda en la política pública, habrá que alguna cosa negro sobre blanco…digo yo.